Doce prelados nacidos en la Comunitat formaban parte del episcopado español en 2013 y ahora son siete I En el cónclave que eligió al papa Francisco se encontraban los purpurados Ricard María Carles y Antonio Cañizares
Empieza el cónclave. Se acerca la elección de un nuevo Pontífice para la Iglesia católica. Las apuestas se disparan apuntando nombres. El colegio cardenalicio antes o después ofrecerá el nombre del elegido. Lo anunciará al mundo la fumata blanca y desde la Basílica de San Pedro se dará a conocer su nombre tras escucharse el tan conocido como esperado mensaje: «Habemus Papam».
El nuevo Pontífice se pondrá al frente de la Iglesia, de la que, claro, también forma parte la de Valencia y su archidiócesis. Ante la inminencia de la novedad surgen preguntas interesadas en conocer ¿qué peso tienen en la cúpula de la Iglesia los nombres valencianos? Para encontrar respuesta se impone acudir a los datos, de los que se extrae una radiografía que muestra una pérdida de representantes de origen valenciano -considerando todo el territorio de la Comunitat-, un descenso por tanto en la influencia de las decisiones del episcopado español que a su vez tienen sus consecuencias en la Iglesia universal, donde sólo uno de los miembros -que no podrá asistir al cónclave- del colegio cardenalicio, monseñor Antonio Cañizares, nació en tierras valencianas.