En Lecturas alternativas del Nuevo Testamento (Verbo Divino), Fidel Aizpurúa nos muestra que la Palabra de Dios es un manantial inagotable, donde siempre es posible descubrir nuevas riquezas y perspectivas para nuestra fe y nuestra misión
Fidel Aizpurúa, hermano capuchino, es un apasionado de la Sagrada Escritura, alguien que ha dejado que la Palabra de Dios modele su vida. En sus numerosas obras, convierte el texto bíblico en un acontecimiento actual, buscando siempre nuevos caminos con la convicción de que, sin renovación, no hay verdadero avance.
Podemos evocar hoy aquellas palabras de san Francisco de Asís a san Antonio de Padua, quien, además de obispo, era un renombrado teólogo de la Escritura: «A fray Antonio, mi obispo, el hermano Francisco, salud. Me agrada que enseñes sagrada teología a los hermanos, con tal que, en el estudio de esta, no apagues el espíritu de oración y devoción, como se contiene en la Regla». Fidel Aizpurúa encarna este espíritu, combinando la enseñanza de la Escritura con un discernimiento constante de la fe.
El título de su nueva obra, Lecturas alternativas del Nuevo Testamento, refleja con claridad su contenido y orientación. En ella, el autor dialoga de manera continua con la cultura actual y rompe con las explicaciones tradicionales, proponiendo una lectura novedosa a partir de una metodología que supera el ámbito meramente académico y elitista para acercarse a la gente sencilla.
Desde la introducción, queda claro que estas páginas nacen del amor y buscan generar amor. Son testimonio de su compromiso con la convicción de que otro mundo es posible. A lo largo del libro, Aizpurúa concede gran relevancia a la dimensión social de la fe, hasta el punto de que podríamos considerar esta obra como una continuación de su anterior trabajo en la misma colección, Lectura social del Nuevo Testamento.
El libro se estructura en diez capítulos, cada uno de los cuales presenta dos niveles de lectura: primero, una lectura preliminar, estándar, que recoge explicaciones habituales y generalmente admitidas; para continuar con una lectura alternativa, más innovadora y enriquecedora, que explora diversas perspectivas (antropológica, relacional, divergente, política, mística, ecológica, etc.) y permite:
Actualizar la lectura de los textos bíblicos desde la realidad del lector, interpelándolo sobre cuestiones actuales.
Profundizar en la dimensión profética de la fe, conectándola con una espiritualidad auténtica.
Analizar la Escritura desde una óptica antropológica, vinculándola a experiencias vitales y subrayando la importancia del diálogo, la cultura del encuentro y la sanación de heridas como camino para seguir a Jesús.
Descubrir en sus páginas una profunda humanidad, enraizada en la esperanza de una «tierra nueva en la que habite la justicia».
Valorar la santidad oculta de tantas personas sencillas que, sin figurar en los altares, irradian amor y vida.
Tomar conciencia de la corresponsabilidad con los más frágiles y vulnerables, comprendiendo que la salvación no es un asunto individualista.
Reflexionar sobre el ejercicio de la autoridad y el liderazgo compasivo.
Asumir que no somos el centro de la creación, sino una criatura más dentro de ella.
Estamos convencidos de que esta obra será de gran interés para quienes buscan una lectura renovada del Nuevo Testamento. Fidel Aizpurúa nos muestra que la Palabra de Dios es un manantial inagotable, donde siempre es posible descubrir nuevas riquezas y perspectivas para nuestra fe y nuestra misión.