Planificar una boda implica tomar muchas decisiones, desde el vestido hasta la decoración y, por supuesto, elegir a tus damas de honor. Pero más allá de tus amigos terrenales, imagínate reunir un cortejo nupcial de santas que te acompañe espiritualmente en tu gran día (y en todos los días siguientes)
Para una novia a punto de dar el «sí, quiero«, tener unas cuantas compañeras santas puede aportar consuelo, sabiduría e incluso una pizca de ayuda milagrosa.
He aquí seis santas que serán las damas de honor perfectas, mientras caminas hacia el altar:
1 María, la Santísima Madre – Dama de Honor Celestial
Consagración a la Virgen María – dama de honor
Ningún cortejo nupcial -terrenal o celestial- estaría completo sin María como Dama de Honor. Como Madre de Jesús, María es el modelo supremo de mujer fiel y la intercesora más poderosa que una novia podría pedir.
¿Recuerdas las bodas de Caná? Cuando se acabó el vino, fue María quien se dio cuenta y le planteó el problema a Jesús. «No tienen vino«, le dijo, y luego dio instrucciones a los sirvientes: «Haced lo que él os diga».
Como tu dama de honor celestial, María aporta amor maternal y una firme confianza en el plan de Dios. Te ayudará a que tu matrimonio sea tan feliz como el banquete de Caná, animándote siempre a «hacer lo que Él te diga».
2 Santa Mónica – Para saber soportar con paciencia
Toda novia espera ser feliz para siempre, pero el matrimonio real tiene sus pruebas. Ahí es donde brilla Santa Mónica. Como patrona de las esposas y madres, Mónica conoce el poder de la oración y la perseverancia en la vida familiar.
Soportó un matrimonio difícil con un marido malhumorado e infiel, pero nunca se dio por vencida. Su paciencia y su fe inquebrantable dieron sus frutos cuando su marido se convirtió poco antes de morir.
Y, por supuesto, sus insistentes oraciones ayudaron a convertir a su descarriado hijo, el futuro san Agustín. Si una de tus damas de honor necesita sostener la caja de pañuelos y animarte en los momentos difíciles, ¡ésa es Mónica!
3 Santa Gianna Beretta Molla – para mantener a raya el estrés
Cuando se trata de una santa que realmente entiende los malabares de la vida matrimonial moderna, Santa Gianna es tu chica. Gianna Beretta Molla, pediatra, esposa y madre italiana del siglo XX, vivió su vocación con extraordinario amor y sacrificio.
Compaginó el cuidado de su familia con una carrera profesional, demostrando que la santidad prospera en la ajetreada rutina diaria del matrimonio y el trabajo. Un ejemplo de virtud heroica.
Como dama de honor celestial, santa Gianna ofrece inspiración para abrazar la abnegación y el apoyo mutuo en tu matrimonio.
Rezará para que tú y tu cónyuge afronten cada día con el mismo amor generoso, e incluso puede que les recuerde que deben cuidarse en medio del estrés de la boda (¡órdenes del médico!).
4 Santa Rita – ante cualquier crisis
¿Esperas que tu matrimonio transcurra sin sobresaltos, pero quieres un refuerzo para las tormentas de la vida? Santa Rita es cariñosamente apodada la patrona de las causas imposibles y los matrimonios difíciles.
Como tu dama de honor celestial, te ofrece la esperanza de que incluso las malas rachas pueden conducir a un mayor amor y santidad. ¿Te sientes frustrado con tu cónyuge o ansioso por el futuro?
Susurra una oración a santa Rita. Ella es un faro de esperanza para los matrimonios con problemas, siempre dispuesta a interceder por la reconciliación, la paz y la fuerza para seguir amando contra viento y marea.
5 Santa Isabel de Hungría – para mantener un espíritu generoso
Toda novia merece una amiga que no solo celebre su alegría, sino que también la inspire a la caridad y la bondad. Santa Isabel de Hungría es esa amiga con creces.
La vida de santa Isabel demuestra que el amor conyugal y la caridad cristiana pueden ir de la mano. Como tu dama de honor en el cielo, te anima a construir un matrimonio rico en amor y generosidad.
Ella te inspirará para que veas tu vida matrimonial no solo como una unión de dos, sino como una oportunidad para que ambos bendigáis a los demás.
Con la intercesión de santa Isabel, su matrimonio puede convertirse en un cuento de hadas, en el que «felices para siempre» significa amarse mutuamente y amar a los que les rodean con la compasión de Cristo.
6 Beata Chiara «Luce» Badano – Compañera Alegre
Toda novia necesita una amiga que le aporte luz, alegría y energía juvenil, y eso es exactamente lo que ofrece la beata Chiara «Luce» Badano. Nacida en Italia en 1971, Chiara era una adolescente llena de vida a la que le encantaba jugar al tenis, hacer senderismo y bailar con sus amigos.
Como tu dama de honor celestial, Chiara Luce te recuerda que debes apreciar cada momento de la vida matrimonial, desde los días mundanos hasta las celebraciones más importantes.
Es la amiga que estaría la primera en la pista de baile de tu boda, sonriendo a pesar de todo con una alegría contagiosa.
