Es un sacerdote católico portugués que se hizo conocido por sus sets de música electrónica, a menudo actuando con su indumentaria eclesiástica, criticado por unos y aclamado por otros y al que esperaban 150.000 personas.
Su actuación en el festival, que tuvo lugar en la playa de Cullera, Valencia, atrajo a una gran multitud, consolidando su fama como una figura única en el mundo de la música y la religión.
El Padre Guilherme se hizo viral después de una sesión en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Lisboa en 2023, donde tocó para una multitud de jóvenes. Su popularidad creció rápidamente y desde entonces es conocido por su capacidad de combinar la fe y la música electrónica. Su presencia en el Medusa Festival fue muy esperada, y según los organizadores del evento, sus sesiones son ideales para quienes quieren disfrutar de la música electrónica sin tener que elegir entre la misa y el «after».
Más de 150.000 personas se reúnen en Cullera para escuchar al padre Guilherme
Este sábado, la playa de Cullera, que es durante estos días el epicentro mundial de la música electrónica, ha tenido como gran protagonista a este sacerdote, que ha compartido cartel con algunos de los artistas más importantes del panorama internacional, como Armin Van Buuren, D-Block & S-TE-FAN, Luciano o Djs From Mars.
A sus 24 años, el padre Guilherme se ordenó sacerdote, llegando incluso a servir como capellán en las campañas de Afganistán y Kosovo. Fue precisamente durante esas misiones donde comenzó a usar el techno para transmitir su fe.